
Refranes que encajan en la situación: ¡Nunca llueve para todos!… ¡Dios aprieta, pero no ahoga!
- Utilicen a sus empleados en otras labores como limpieza profunda, pintura, labores de mantenimiento y embellecimiento de sus locales.
- Aprovechen el tiempo para hacer un buen inventario de todo lo que la empresa tiene para prestar servicios y reparar los productos.
- Revisen los costos de sus productos y servicios para disponer de ofertas atractivas que sorprendan a sus clientes después de la crisis.
- Comunique ya a los bancos que por Ley tienen que cerrar el negocio, no tendrán ingresos un determinado tiempo y no podrán cumplir con las cuotas de los créditos. Se supone que el gobierno preparará alguna medida especial para que las empresas sobrevivan la crisis sin quebrar.
- Aprovechen estas semanas para poner al día la contabilidad.
- Los equipos gerenciales pueden hacer un plan de trabajo online para después de la crisis y un análisis FODA. Cada uno desde su computadora.
- Se puede capacitar a los empleados en las cosas importantes del negocio online, a una determinada hora, incluso pasar un test de satisfacción en el trabajo y solicitud de sugerencias para mejorar los procesos y los productos.
- Si es posible, y se tiene que quedar en casa, deles indicaciones para que le dediquen tiempo a su familia y sus hijos.
- Si pueden, preparen una alternativa de atender online, y si es comedor o restaurante, una alternativa para la opción “para llevar”.
- No pierdan la calma, por peores momentos hemos pasado y los hemos sobrevivido.
- Si en último caso concluyen que lo más conveniente es cerrar el negocio, ¡ciérrenlo!, antes que los hunda del todo… Y después de la crisis, abran uno nuevo y aprovechen este tiempo para redefinirlo y hacerlo mejor.
Pedro Roque